El valle de Pineta discurre a lo largo de 14 Kms. entre la sierra de las Sucas y la de Espierba, recorrido en toda su longitud por el río Cinca, está jalonado por imponentes murallones de más de 1000 m. de desnivel, conocidos también como las paredes de Pineta. La salida la efectuamos al fondo del valle, en las inmediaciones del parador nacional de Monte Perdido (1290 m.), por la parte trasera se cruza el río Cinca por un puente situado a unos 200 m. carretera abajo, quedando este a nuestra derecha.
El camino continua después ascendiendo ligeramente hasta cruzar otra vez el río. El recorrido, perfectamente señalizado, prosigue a nuestra izquierda y se interna en un mar de helechos, zona conocida como el Felqueral. En la ruta dejaremos a mano izquierda el camino de las Cascadas de Pineta y de la Faja Tormosa, giraremos a la derecha ganando altura de forma súbita por las paredes del circo. Los continuos zig – zag, que evolucionan entre pastizales y barreras de rocas, nos permiten ganar altura poco a poco, mientras vemos como el valle se va “hundiendo”; el último tramo conocido como “el Embudo” es un corredor – donde incluso en verano suele mantenerse un nevero – que desemboca en un altiplano del Balcón de Pineta (2520 m.).
A nuestra izquierda se levanta la cara norte de Monte Perdido y sus dos glaciares colgados, así como la cara cortada del Cilindro de Marboré. Esta altiplanicie es un sitio de paso obligado para acceder a algunos de los tres miles más conocidos de la zona. Continuando en dirección N.O. por el camino más marcado se llega, en poco tiempo, a la presa y las orillas del lago Marboré (2595 m.). El regreso lo haremos por el mismo recorrido.
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