Vitoria-Gasteiz
Vitoria-Gasteiz es la ciudad capital de Álava, sede oficial del Parlamento y de las instituciones comunes de la comunidad autónoma del País Vasco.
Enclavada en un cruce de caminos, ha sido a lo largo de la historia un importante punto estratégico, tanto en el plano militar como en el comercial y el cultural. Ya desde tiempo de los romanos, en los que la calzada que unía Astorga y Burdeos pasaba por Álava, esas tierras no dejaron de ser un eje de comunicaciones entre la Meseta Central y Europa. Es una ciudad con una intensa historia que se manifiesta en un valioso patrimonio monumental.
Vitoria fue sucesivamente gótica y renacentista, barroca, neoclásica y románica. La planificación ha sido una constante en su devenir histórico, desde su primer ensanche medieval a comienzos del siglo XIII hasta sus modernos parques y barrios periféricos. Su casco viejo mantiene íntegro el trazado gótico y sus calles elípticas y estrechas, con empinados cantones y antiguos y recobrados palacios. Los nombres de sus calles conservan los de las actividades gremiales de aquella época: Cuchillería, Herrería, Zapatería… El propio autor francés Víctor Hugo definiría a Vitoria en una de sus obras como la villa gótica completa y homogénea.
El Renacimiento también dejó su huella en la colina, en forma de elegantes palacios construidos por las familias nobiliarias. Fuera del casco medieval existen otros espacios emblemáticos como la Plaza de la Virgen Blanca, la Plaza de España y los Arquillos, del Neoclasicismo.
Vitoria es hoy en día un nudo de comunicaciones por carretera. La ciudad cuenta con una posición estratégica privilegiada dentro del llamado eje Atlántico. Por su condición de capital de la comunidad autónoma del País Vasco, alberga la sede de los distintos órganos institucionales: Presidencia del Gobierno de la comunidad autónoma, Gobierno Vasco y Parlamento Vasco. La capitalidad ha dado a la ciudad un notable dinamismo. Hoy en día posee el centro comercial más grande de todo el País Vasco, denominado El Boulevard.
Monumentos y lugares de interés
- Catedral de Santa María (Catedral Vieja). Edificio del siglo XIV.
- Catedral de María Inmaculada. Templo catedralicio del siglo XX, de estilo neogótico.
- Iglesia de San Pedro Apóstol. Templo gótico del siglo XIV.
- Iglesia de San Miguel Arcángel. Templo gótico renacentista de los siglos XIV a XVI.
- Iglesia de San Vicente Mártir. Templo gótico tardío de los siglos XV y XVI.
- Muralla medieval. Obra realizada en el siglo XI.
- Casa Cordón. Arquitectura gótica del siglo XV.
- Torre de los Hurtado de Anda. Torre medieval del siglo XV.
- El Portalón. Fundado a finales del siglo XV como casa de Postas.
- Convento de Santa Cruz. Del siglo XVI.
- Palacio de Ajuria Enea. Sede del Gobierno Vasco y residencia del Lehendakari.
- Y un largo etcétera que nos hará agradable la estancia en esta tierra de diversidad.
Monte Gorbea
El Monte Gorbea es la cumbre más alta del macizo montañoso del mismo nombre, situado a caballo entre las provincias de Álava y Vizcaya. Tiene una altitud de 1482 m., y su cima está coronada desde el año 1899 por una cruz metálica. Ese año, el papa León XIII llamó a levantar cruces en todas las cimas de los montes más altos de la cristiandad, para dar de esta forma la entrada del siglo XX. A lo largo de los años ha habido diferentes versiones, la actual tiene 17,23 metros de altura y es un tradicional punto de referencia del montañismo vasco y el corazón del Parque Natural de Gorbea.
El Monte Gorbea está rodeado de un espléndido paraje natural que ha servido de sustentación para las labores más arraigadas de los modos de vida rurales: el pastoreo, la producción de carbón y la agricultura de montaña. Sus hayedos y robledales guardan construcciones prehistóricas que nos recuerdan que estas tierras fueron habitadas por el hombre desde el principio de los tiempos. Esos parajes, conservados en el aislamiento de la civilización, son los que han dado origen al Parque Natural de Gorbea que, junto al cercano Parque Natural de Urquiola, mantienen, entre ambos, una rica diversidad de vida animal y vegetal.
El Monte Gorbea se alza entre los picos que lo rodean y forma parte de un sistema montañoso. Entre los barrancos de caliza, y con las peñas de la Sierra de Amboto de fondo, una gran colina verde con una pronunciada pendiente conforma la cumbre de este emblemático Monte. Es uno de los cinco montes bocineros de Vizcaya, desde donde se convocan Juntas Generales mediante hogueras y toque de cuernos.
Su bonanza en el ascenso lo ha hecho muy popular entre los montañeros vascos, que acuden a su cima desde todas las vertientes. Es tradicional que el 31 de diciembre y el 1 de enero de cada año los vascos acudan con sus familias.
El nacedero del río Urederra
El murmullo del agua cristalina, la luz que se filtra entre las hojas de los árboles tiñendo de verde lima el paisaje y el aroma a naturaleza, contribuyen a que este lugar, declarado reserva natural en 1987, sea uno de los enclaves más espectaculares de Navarra.
El nacedero del Urederra, situado al norte de Estella-Lizarra, en el término de Baquedano, es la salida natural del acuífero formado en el macizo kárstico de Urbasa. La primera surgencia se produce en un cortado a 630 metros de altitud, en el reborde meridional del macizo, originando una impresionante caída de más de cien metros que en el transcurso de millones de años ha modelado un anfiteatro rocoso de notable belleza.
En su devenir se suceden otras cascadas y numerosas pozas. El color turquesa, que predomina la mayor parte del año en las pozas, se produce por la gran cantidad de carbonato cálcico y minerales originados por la disolución de las rocas y que el agua deposita en el lecho del río. Ayudado por la reflexión de la luz solar sobre unas aguas carentes de lodo, hace que estas adquieran una espectacular tonalidad azulada. En cambio, en época de lluvias el agua desciende con tal virulencia que hace que esos elementos no se depositen en el fondo; es entonces cuando adquiere un color verde esmeralda. La especial tonalidad de estas aguas es la que seguramente habrá inspirado a quien bautizó al río con el nombre de Urederra, que significa agua hermosa.
Pero, además del agua, cabe mencionar la diversidad de flora y fauna que integran este espacio natural: hayas, robles, olmos, arces, tejos, avellanos, entre otras especies vegetales; y buitres, alimoches, milanos, aguiluchos o cuervos, como protagonistas del reino animal.
Balcón de Pilatos
Forma parte de la hendidura o retroceso de la cornisa calcárea de la Sierra de Urbasa, que se abre aquí en un alarde de frescura y de misterio. El Balcón de Pilatos está situado a una altura de 924 metros y constituye un magnífico circo rocoso de 300 metros de desnivel, desde el que se pueden obtener unas vistas hermosas del valle de Améscoa. Describe una circunferencia casi perfecta, y en su cabecera se encuentra el barranco de Ubagua, en donde nace el río Urederra.
Esta hendidura abierta por el río durante siglos, forma parte del monte Limitaciones, el cual pertenece a los valles de Améscoa desde 1412. Los habitantes de esta zona, situada al sur de Urbasa, usufructuaron los diversos recursos de la sierra (pastos, cultivos, madera, piedra, agua y nieve) desde tiempo inmemorial. Pero al ser todos los montes navarros de propiedad real, los amescoanos tenían que compartir sus aprovechamientos con los ganaderos de otras zonas.
Ello dio lugar a conflictos, que se resolvieron finalmente cuando el rey Carlos III reconoció la propiedad de los amescoanos y su derecho exclusivo a usufructuar la franja meridional de la sierra, conocida hoy como monte Limitaciones, que se extiende desde Entzia (en la frontera con Álava) hasta la falda de Zumbelz, límite con la Sierra de Andía.
Son diferentes los senderos que permiten recorrer esta parte de la sierra bordeando el acantilado, donde se divisan el valle de Améscoa y otros parajes de Estella. En sus paredes rocosas anidan buitres y alimoches y también podemos observar el volar majestuoso del quebrantahuesos. Abajo, en los bosques de haya, roble, olmo, arce, etc. que rodean el nacimiento del Urederra, tienen su habitat diversas aves: herrerillos, carboneros, chochines, mosquiteros y lavandera cascadeña.
Este paraje, actualmente integrado en el Parque Natural de Urbasa?Andía, se sitúa en el valle de Améscoa, un territorio de transición bioclimática flanqueado por el altiplano de Urbasa y la sierra escarpada de Loquiz. Améscoa nos ofrece, entre otros atractivos, la posibilidad de realizar diversos recorridos naturales, de observar múltiples vestigios megalíticos o de conocer pueblos que han sabido mantener el sabor de antaño.
El camino de Santiago en Navarra
Vamos a realizar una de las rutas más bonitas y a la vez exigentes del camino de Santiago en Navarra, la que nos llevará de Estella a Los Arcos.
Salimos de Estella-Lizarra, ciudad situada en la zona occidental de la Comunidad Foral de Navarra, por la calle San Nicolás. Tras pasar el arco de las antiguas murallas, la vía cambia su nombre por el de Camino de Logroño. El camino discurre un par de kilómetros alternando casas y primeras tierras de labor hasta las Bodegas de Iratxe, donde se encuentra la famosa Fuente del Vino, un surtidor que da vino gratis a los caminantes. Muy cerca se encuentra el Monasterio de Iratxe, uno de los monumentos medievales más importantes de
Navarra y punto íntimamente ligado a la tradición jacobea. El edificio actual empezó a construirse en el siglo XI y alterna elementos del último románico con los primeros momentos del gótico. Un ejemplo claro es su iglesia románica y el claustro plateresco.
Después del monasterio el camino se divide, el que va a la derecha es el camino tradicional, hasta llegar a la localidad de Azqueta. Al abandonar este pequeño pueblo, el camino da un giro a la izquierda para empezar el ascenso hasta Villamayor de Monjardín. El camino transita entre tierras de cultivo y pequeñas zonas arboladas. Antes de alcanzar el pueblo se pasa junto a la Fuente de los Moros, un aljibe medieval que aún está en funcionamiento. Villamayor de Monjardín es una de las joyas de la etapa. La Iglesia románica de San Andrés (siglo XII) bien merece una pausa. La senda deja el pueblo bajando un par de kilómetros; discurre ahora entre viñedos, buscando el cruce de Urbiola. A partir de aquí el camino transita por pistas de tierra entre bosques de pino y tierras de labor hasta llegar a Los Arcos.
Los Arcos no tiene la monumentalidad de otros fines de etapa del Camino de Santiago, pero la iglesia de Santa María está entre los edificios más notables de la ruta jacobea. El exterior tardorrománico esconde un interior barroco recargado de oro; el claustro, del siglo XVI, es otro de sus elementos más interesantes.
Quienes no realicen esta etapa, tienen un tiempo para visitar detenidamente Estella-Lizarra. La influencia del camino de Santiago y de la judería envuelve toda la ciudad, que vivió su época de máximo esplendor durante los siglos XII y XIII. Destacan, entre otros: el Palacio de los Reyes de Navarra, la Iglesia de San Pedro de la Rúa, la Iglesia de San Miguel, la Basílica de Nuestra Señora del Puy, el Convento de Santa Clara, la Casa de Fray Diego…